Visitas [Mary]

Debia admitir, nunca en alto claro, que echaba de menos a mi amigo. Echaba de menos su preguntas indecentes, su irritante curiosidad, sus cabreos por mis malas maneras y costumbres... Echaba de menos sus malas deducciones que me permitían lucirme como detective, sus pomposos escritos sobre mis casos que le daban más importancia a las personas que a los hechos. Echaba de menos discutir con él.

Me supuse que era por eso que mis pies me habían llevado al West End y justo en frente de su casa. Llamé a la campanilla y no tardo nada en aparecer una criada frente a la puerta. Le sonrei amablemente y pregunté por la Sra Watson. Nada más abrir había visto que él no estaba en casa y, sería descortes irme sin más, asi que no estaría mal darle una visita a una mujer embarazada. La joven criada se marchó a buscarla una vez estuve dentro.

Aquella mañana habia sido mas tranquila que las otras, James ya habia salido hacia el hospital hacia horas y ella no tenia que dar clases ese dia, estaba arreglandose despues de un baño, cuando escucho que llamaban a su puerta, ella no necesitaba criadas, no le agradaba demasiado aquello, pero James habia insistido no queria dejarla sola mientras el estaba en el hospital.

- El Sr. Holmes se encuentra en la sala - dijo con aquella voz dulce que caracterizaba a la chica, Mary se sorprendio por aquella visita pero asintio.

- Enseguida bajo - le informo y ella salio de la habitacion, termino de arreglarse un poco y se observo un momento, apenas y se notaba su vientre, aun era pronto para que se notara pero ella ansiaba ese cambio para poder creer que no soñaba, suspiro y bajo lentamente las escaleras, y lo observo ahi en la sala, le ofrecio una sonrisa cuando estuvo frente a el - Sr. Holmes.. buenos dias - dijo amable mientras se sentaba enfrente de el - desea algo de tomar?

Ya había soltado mi sombrero, peinado mi pelo y colgado mi abrigo, cuando ella bajó y entró en el salón donde me supuse que era para recibir las visitas. No había estado aqui muchas veces, y todas ellas no había pasado de la entrada. Siempre venía para "secuestrar" a Watson durante unas horas o incluso días. Sabía que ella no estaba de acuerdo con aquellas salidas repentinas de su esposo, él siempre se exponía demasiado al peligro por mi culpa, pero era demasiado egoista como para preocuparme por lo que ella pensase.

- Buenos dias - dije haciendole un saludo con la cabeza. Me encogi levemente de hombros cuando ella preguntó por lo que tomase. La verdad había desayunado hacía escasa media hora y no me apetecía nada, sin embargo era descortés rechazar una propuesta - Lo que usted tome está bien - dije sin comprometerme demasiado.

Observo a la criada y ella asintio, esa era la hora del te para Mary - ha llegado tarde.. James no se encuentra...- ella seguia molesta por la ultima vez que lo habia secuestrado y se lo habia llevado a quien sabe donde, admiraba a Holmes, pero que pusiera e peligro a James no le agradaba en lo absoluto mas ahora, ella esperaba un hijo y queria que tuviera a su lado a su padre.

Ella sabia que Holmes sabia de su situacion, y sabia que ella queria que James pasara mas tiempo con ella pero siempre era lo contrario por que ahora tenia mas trabajo y apenas y lo veia.

LLego el te y Mary solo dio un sorbo antes de apartarlo, las nauseas normalmente con el te se quitaban pero pareciera que hoy solo las habian empeorado.

Solté un suspiro cansado mientras tomaba asiento en el sillón frente a ella. Era cómodo y, como toda la casa, parecía bastante caro. Watson debía haber ahorrado mucho para pagar una casa como esta, estaba seguro que ella había exigido poner de su parte. Era una buena mujer, por mucho que me sacase de quicio, y quería a mi amigo.

- Ya sé que no está - dije mirando como ella apartaba el té. Al parecer aún seguia en la fase de las naúseas, ¿cuanto llevaba ya de embarazo? 1 mes si mal no recordaba. - No le miento se le digo que venía a buscarle, pero no vi ni su sombrero ni su bastón ni su levita en el colgador, podría haberme ido...pero he decidido no hacerlo - dije con tono cortés. Extraño en mi ya que normalmente siempre estaba enfurruñado frente a ella.

Observo a Holmes y se regaño a si misma, estaba siendo demasiado descortes, - perdone mi descortesia pero.. - y ahi se detuvo, James no habia notado que ella no se sentia bien, aunque siempre le dijiera que no se preocupara, no se suponia que ella ya no tendria tantas nauseas, suspiro hondo - pareciera que es un efecto que solo me ocurre con usted - dijo con cortesia, aunque aquello pareciera mas un sarcasmo para atacarlo, claro esta que esa no era su intencion.

Suspiro hondo e intento relajarse, conocia a Holmes y sabria que cualquier movimiento, y accion podia delatarla, y el no se quedaria callado, James lo sabria al instante. Despues decian que las mujeres eramos las que eramos comunicativas, pero bueno debia admitiar que Holmes eran el mejor amigo de su esposo, y siempre veia por su bien.

Sonrei de lado y la miré con cierta diversión. Ella era de las pocas personas que se permitían el lujo de atacarme y pretender no hacerlo a la vez. Era lista, como buena mujer, merecía mi respeto y tan solo a veces lo tenía. No me fiaba de ella y siempre me mostraba a la defensiva cuando estabamos a solas.

- Deberia afectarme provocar tal efecto en las mujeres - dije continuando su pequeña frase sardónica. Olisqueé mi taza de te, por puro instinto, y tomé un trago. Ardía pero estaba rico, mucho mejor que el de Hudson, y calentaba mi cuerpo - ¿Cómo se encuentra? - pregunté con verdadero interés, al fin y al cabo sería el hijo de mi mejor amigo, un motivo más para alejarse de mi ¿Impedirían mis visitas?

Mary observo a Holmes, el pareciera que siempre estaba a la defensiva en su presencia y ella tambien respondia de la misma manera, y la temida pregunta habia aparecido y tenia que admitir que no sabia como responder he estado mejor pero me imagino que son malestares normales en alguien en mi estado

Ella a pesar de que Holmes no era de su agrado al menos no del todo, pero ella no queria separarlos esa no era su intencion, pero si James vivia ahi con ella era logico ambos eran marido y mujer y necesitaban privacidad.

La miré arqueando una ceja, la verdad nunca había estado con una embarazada, yo era el menor de mis hermanos y no estaba muy apegado a mi familia como para haber visto a mis tias embarazadas. Mis relaciones con las mujeres era escasa, tan solo me relacionaba con aquellas que era dificil que alguna vez quedasen en estado. Detectives, prostitutas, solteras... Irene. Bueno, ella si que tenía posibilidades. De repente mi rostro quedó pálido ¡En nuestro último encuentro ella no había tomado nada!

- Uh... - la miré con cierto desconcierto, había desconectado de lo que ella había dicho pero algo había captado. - Tiene un marido medico no? - dije tratando de mantener la compostura, pero la verdad era que estaba hiperventilando.